Por: Redacción Constructivaonline.com.ar

El Gobierno nacional alcanzó un nuevo avance en la implementación del Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) con la aprobación del proyecto minero Gualcamayo, ubicado en la provincia de San Juan.

El anuncio fue realizado por el ministro de Economía, Luis Caputo, quien destacó la magnitud de la inversión y el impacto que tendrá tanto en el empleo como en la producción minera del país.

Gualcamayo es un emprendimiento de oro y plata que contempla una inversión estimada en US$ 665 millones y la generación de unos 1.700 puestos de trabajo directos. El proyecto permitirá extender la vida útil de una mina que se encontraba próxima al agotamiento.

Según explicó Caputo, la continuidad del yacimiento será posible gracias a la incorporación de un nuevo tipo de mineralización, lo que abre una nueva etapa productiva para el emprendimiento y para la minería sanjuanina en general.

Con esta incorporación, el Ejecutivo nacional ya contabiliza diez proyectos aprobados dentro del RIGI, con compromisos de inversión que superan los US$ 25.000 millones. La mayor parte de estas iniciativas están vinculadas a los sectores energético y minero.

Los proyectos se distribuyen en distintas provincias del país, entre ellas San Juan, Mendoza, Neuquén, Río Negro, Salta, Catamarca, Buenos Aires y Santa Fe, consolidando un mapa federal de inversiones estratégicas.

Energía, minería e infraestructura entre los proyectos aprobados

El listado de iniciativas incorporadas al régimen incluye desarrollos de energías renovables, infraestructura energética, minería de litio, cobre, oro y plata, además de proyectos industriales y portuarios de gran escala.

Entre los emprendimientos destacados figuran el oleoducto Vaca Muerta Sur, la ampliación del proyecto Rincón de Litio de Rio Tinto, el desarrollo cuprífero Los Azules y la nueva planta siderúrgica de Sidersa, entre otros.

Este escenario de inversiones se ve acompañado por un contexto favorable en los mercados internacionales. Con el precio del oro en máximos históricos, por encima de los US$ 4.500 la onza, el sector minero argentino muestra un fuerte dinamismo exportador.

Entre enero y noviembre de 2025, las exportaciones mineras alcanzaron los US$ 5.406 millones, lo que representó un crecimiento interanual del 30,7%, según datos oficiales.

Mientras continúa la incorporación de proyectos, el Gobierno analiza la posibilidad de extender el plazo de adhesión al RIGI más allá de julio de 2026. Así lo adelantó el secretario de Coordinación de Energía y Minería, Daniel González.

El funcionario recordó que ya ingresaron más de 27 iniciativas para su evaluación y que la decisión sobre una eventual prórroga podría tomarse durante el próximo verano.

La normativa vigente establece un período de dos años para adherir al régimen, con la opción de una única prórroga de hasta un año adicional, que queda a criterio del Poder Ejecutivo nacional.

Este marco temporal busca acelerar las decisiones de inversión y dar previsibilidad a los grandes proyectos que evalúan desembarcar en el país.

El atractivo del RIGI para las empresas radica en un paquete de incentivos fiscales y regulatorios, que incluye la reducción del Impuesto a las Ganancias del 35% al 25%, beneficios en derechos de exportación y un tratamiento especial del IVA en la etapa preoperativa.

A esto se suma la posibilidad de recurrir a arbitraje internacional ante eventuales controversias, un punto valorado por los grandes inversores.

Con la aprobación de Gualcamayo, el RIGI reafirma su rol como motor de inversiones de gran escala, especialmente en minería y energía, sectores clave para la generación de divisas y empleo.

El desafío hacia adelante será sostener este flujo de proyectos, garantizar su ejecución efectiva y maximizar su impacto en el desarrollo productivo y regional del país.