Por: Redacción Constructivaonline.com.ar
La Reserva Natural Villavicencio celebró sus 25 años como área protegida, consolidándose como uno de los modelos de gestión ambiental más destacados de la región. El gobernador Alfredo Cornejo encabezó el acto central, acompañado por autoridades provinciales, municipales, científicos y trabajadores del área.
En su discurso, Cornejo destacó el trabajo sostenido desde el año 2000 que permitió transformar a Villavicencio en una referencia internacional. El mandatario afirmó que el Gobierno aspira a replicar este modelo en otras áreas protegidas y reforzar las políticas de conservación que Mendoza impulsa desde hace décadas.
“Venimos a ratificar esta política y por eso trabajamos juntos en el plan de manejo de la reserva, tal como lo hicimos en otros espacios protegidos”, señaló el Gobernador, recordando también el trabajo conjunto que permitió la designación como Sitio Ramsar
Durante el acto, Cornejo agradeció a la compañía responsable de la gestión de la reserva y reconoció a los equipos que sostienen diariamente el funcionamiento del área natural. También se distinguió al técnico en conservación Roberto Tobárez por su labor durante los 25 años de la reserva, y a un grupo de científicos que acompañaron proyectos de investigación y divulgación.
Entre los hitos alcanzados, Villavicencio redujo un 91% de sus residuos, mantuvo 15 años sin incendios y alcanzó un 70% de sustentabilidad económica, resultados que la posicionan como referente global en manejo de áreas protegidas y gestión de recursos.
En 2017 ingresó en la Ley de Ordenamiento Territorial y fue declarada Sitio Ramsar por la protección de humedales, y en 2020 se incorporó a la Red Estratégica de Conservación del Cóndor Andino, al tiempo que fortaleció el monitoreo del gato andino mediante cámaras trampa, una acción clave para la preservación de especies en riesgo.
Uno de los pilares del proyecto es la educación ambiental, donde el Programa de Visitas Educativas, declarado de interés provincial, forma a más de 5.000 estudiantes por año, y se ha convertido en una herramienta esencial para sensibilizar a las nuevas generaciones sobre la importancia de la conservación.
A su vez, el equipo de guardaparques sostiene tareas permanentes de monitoreo, control de especies invasoras y prevención de incendios, dentro de una serie de acciones que son fundamentales para mantener la integridad ecológica de la reserva y garantizar su función como corredor biológico estratégico.
Con más de 100.000 visitantes por año, la Reserva Natural Villavicencio se consolidó también como un motor de desarrollo local. La actividad turística genera empleo directo, integra proveedores y agencias, y potencia emprendimientos de la zona, reforzando el vínculo entre comunidad y conservación.
En paralelo, la reserva acompañó durante este cuarto de siglo a más de 20 investigaciones científicas y 12 prácticas profesionales, promoviendo conocimiento aplicado y fortaleciendo su rol como laboratorio natural para universidades y organismos científicos.
La directora del área, Silvina Giudici, destacó que el desafío de los próximos 25 años será consolidar un camino que integre ciencia, comunidad, empresa y naturaleza, dentro de una visión de futuro que apunta a profundizar el modelo de conservación y ampliar el trabajo con actores locales.
En el mismo sentido, la reserva representó recientemente a la Argentina en el Congreso Mundial de la Naturaleza organizado por la UICN, siendo el único sitio del país dentro del contexto de la Lista Verde, un reconocimiento internacional que valida su excelencia en gestión ambiental.